El Astorga impuso su jerarquía de equipo de 2ª RFEF este sábado ganando al Guijuelo por 3-1 en un nuevo amistoso de preparación que, además daba contenido al Trofeo Santa Marta.
Las cosas empezaron bien para el Astorga, que nada más sacar el balón de centro, en la primera aproximación a la puerta visitante, encontró en Adri el camino a la ventaja por 1-0. Era el minuto 1 y parecía venirse una goleada.

Lago había salido de inicio con Martín, Jony, Sergio, Ayub, Nistal, Manso, Aleixo, Adri, Ivi Vales, Selles y Mario. Durante el segundo tiempo también se fueron incorporando Llamazares, Dani Rodríguez, Ceinos, Augusto, Albertín, David, Canito, Jesu, Cervero e Imad.No estuvieron convocados los lesionados Cris Bueno y Ribeiro
Pero no fue así, el Guijuelo, al que le costaba mucho salir de la presión alta del Astorga, aproximaba algún que otro contraataque que siempre acababa por la línea de fondo, inquietando poco a Martín Cascajo. Pero en el 35, un balón centrado al área astorgana tuvo una defensa muy blandita por parte de Selles que permitió al charro Roberto ganar la posición, levantarse en el pico del área pequeña, marcar los tiempos y hacer un bonito gol de cabeza que mandaba empatados a los dos equipos al vestuario después de que los locales malbarataran hasta tres ocasiones claras de gol.

En el segundo tiempo, el Astorga parecía sucumbir a una presión más adelantada del Guijuelo, pero cuando más estrechaban el cerco los visitantes, Nistal corrió su lateral y mandó un centro al área donde esperaba un bosque de jugadores. Ayub, en posición forzada, ganó el balón y trató de lanzar a puerta entre un bosque de piernas: una de las de un defensor desvió el balón que se convirtió en una vaselina imposible de parar por el portero.

Era el minuto 57 y con el 2-1 y los cambios, el Astorga volvió a dominar el partido gozando de otro par de ocasiones que no fue capaz de transformar. Cuando apenas faltaban cinco minutos para el final, el bullicioso Adri se marchó de su par, enfiló el área en diagonal y se plantó solo delante del portero. Adivinó que le escoltaban dos compañeros y en lugar de intentar hacer gol, optó por centrar y buscar a alguno de ellos, En su lugar, su pase tropezó con la pierna de un defensor que acabó llevando el balón a las mallas para hacer el 3-1 final.
