Este domingo se conmemora el Día Mundial del Alzheimer que este año lleva por lema «Igualando Derechos». Un año más, la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer de Astorga y Comarca se suma a esta celebración con una serie de actos que arrancaron este lunes con un encuentro entre familiares y medios de comunicación en el que las familias compartieron sus testimonios al lado de los enfermos, usuarios del Centro de Día.
Manuel, Mª Paz, Ana, Ángel y Agustín han compartido con esta redacción sus testimonios del día a día al lado de un enfermo de Alzheimer, una patología que cuenta con más de 800.000 diagnosticados en España aunque se calcula que las cifras pueden llegar a los 1,2 millones ya que, tal y como detalló la presidenta de la AFA, Julia González, hay muchas personas sin diagnosticar.
El Centro de Día de Astorga atiende actualmente a 51 personas de las 25 están todo el día y hay otros usuarios de mañana o de tarde a los que se suman los que acuden los sábados.
Este espacio supone «un respiro fundamental para los familiares porque además aquí sabemos que reciben una atención muy especializada», afirma Manuel que desde hace ocho meses tiene a su mujer en el centro. Confiesa, como el resto de familiares, que «tomar la decisión es complicado pero sabemos que aquí están muy bien atendidos».

En el caso de Mª Paz es su padre el que acude al Centro de Día, desde Sopeña. «Nunca nos lo habíamos planteado hasta que tuvo un episodio agresivo y consideramos que era importante que tuviera un tratamiento y este espacio nos ha dado mucha calidad de vida tanto a él como a la familia y no tenemos más que palabras de agradecimiento para los trabajadores que se han convertido casi en familia».
Sin duda la historia de Ana es la más cruda. Su padre acude al Centro de Día unas horas pero su madre también está diagnosticada con Alzheimer aunque «se niega a venir». «Mi familia fue muy reacia para que mi padre viniera al centro pero para los familiares es fundamental poder contar con un respiro». Ana pide que «seamos valientes al tomar la decisión antes que sea tarde y si es posible en los primeros estadios de la enfermedad mejor porque es más positivo para el paciente».
También reclama «más herramientas para las familias porque a veces no sabemos cómo tratar a los enfermos o cómo afrontar determinadas situaciones».
En el caso de Ángel, su madre fue presentando problemas de memoria y tras el diagnóstico «decidimos traerla al centro donde la tratan de maravilla mientras yo puedo estar más tranquilo en el trabajo porque sé que está bien atendida». Agustín tiene a su mujer en el centro desde hace tres años y destaca que «este espacio es como una gran familia, un alivio para los cuidadores pero sobre todo un beneficio para el enfermo por las terapias y el apoyo que recibe».
En la jornada de este martes, la AFA instalará una mesa informativa en el mercado semanal (donde también venderá su lotería de Navidad). Además, habrá en el Centro de Día una jornada de puertas abiertas de 11 a 13 y 16 a 18 horas. El miércoles será la reunión con otras asociaciones y el jueves, a las 12 horas, se celebrará una misa en el centro.
El viernes, a las 11 horas, se realizará el tradicional acto para conmemorar el Día Mundial del Alzheimer en la Plaza del Ayuntamiento, una celebración en la que participarán escolares de 6º de Primaria de los colegios de Astorga, así como asociaciones, las personas que asisten al Centro de Día y cuantos les quieran acompañar.
El domingo, a las 20:30 horas, se ha programado desde el Ayuntamiento la representación, en el Teatro Gullón, de la obra «Aquellas migas de pan». Con entradas a 10 euros, narra la historia de una escritora recién diagnosticada de una demencia temprana, que recurre a una joven y caótica cuidadora para terminar de escribir sus memorias antes de perder por completo sus recuerdos. Entre ellas se creará un vínculo tan frágil como indestructible que las convertirá en dos mujeres aliadas frente a todos sus abismos personales, navegando por sus vivencias en un onírico viaje que las llevará a lo más profundo de su pasado.
Después de la función, habrá un coloquio con la Fundación Alzheimer España y las actrices Mónica Bardem y Carmen Ibeas.
